¿Alguna vez sintió que algo andaba mal con su cuerpo, pero no estaba seguro de qué lo estaba causando? Cuando algo no va del todo bien con nuestro cuerpo, a menudo experimentamos síntomas. Los síntomas son la forma en que el cuerpo nos hace saber que hay un problema subyacente. En la superficie, la visión borrosa, la cicatrización lenta de las heridas y el hambre constante no parecen estar relacionados. Pero si los junta, es posible que pueda averiguar qué está pasando realmente. Todos estos son síntomas de un nivel alto de azúcar en sangre.
La sangre en el cuerpo humano contiene naturalmente azúcar en forma de glucosa. La cantidad adecuada de azúcar en sangre proporciona energía a las células y órganos del cuerpo. Para mantener los niveles de azúcar en sangre en un rango saludable, el cuerpo necesita insulina. La insulina es una hormona que toma el azúcar en sangre y la entrega a las células del cuerpo. En las personas con diabetes tipo 1, el sistema inmunológico ataca las células del páncreas que producen insulina. En quienes padecen diabetes tipo 2, el cuerpo produce insulina pero no puede usarla correctamente.
¿Qué causa la hiperglucemia?
Cuando está enfermo o estresado, su cuerpo produce hormonas para combatir las enfermedades y el estrés. Esto puede terminar provocando un nivel alto de azúcar en sangre. Otras causas de niveles altos de azúcar en sangre incluyen:
- Insuficiencia de insulina o medicación oral para la diabetes
- Comer o beber más carbohidratos de lo habitual.
- Menos actividad o ejercicio de lo habitual
- Enfermedad o infección
- Lesión o cirugía
- Ciertos medicamentos
Síntomas del nivel alto de azúcar en sangre
Cuando los niveles de azúcar en sangre del cuerpo son demasiado altos, comienzan a crear problemas. Con el tiempo, los vasos sanguíneos se dañan, lo que puede provocar muchas complicaciones. El nivel alto de azúcar en sangre puede terminar provocando un ataque cardíaco o un derrame cerebral, enfermedad renal o insuficiencia renal y daño a los ojos o pérdida de la visión. También puede crear problemas en los nervios de la piel, lo que provoca llagas e infecciones. Ser capaz de reconocer los síntomas del nivel alto de azúcar en sangre puede ayudarlo a detectarlo temprano y evitar que cause un daño permanente.
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